Carta de agradecimiento de Inma Virseda

Después de la ayuda que remitimos a Inma a raíz del desastre provocado por el tifón Yolanda, hemos recibido esta nueva carta de agradecimiento que compartimos ahora.

Queridos amigos: 

MUCHÍSIMAS GRACIAS POR TODOS VUESTROS DONATIVOS PARA LAS VICTIMAS DEL TIFÓN YOLANDA. Todas las ayudas aquí son pocas. Ya sabéis que vuestro dinero aquí se multiplica, así que nos ha llegado un montón de dinero

Ya sabéis que de Lunes a Viernes, tenemos aquí a nuestros 40 niños durante toda la mañana, con lo que sólo nos quedan libres los fines de semana para colaborar con las víctimas del Tifón Yolanda.

No tengo palabras para contaros, esto es una catástrofe humanitaria a gran escala. La televisión se ha focalizado en Tacloban porque es la ciudad más afectada, pero hay islas enteras arrasadas... y no son noticia. Nosotras hemos visitado la isla de Leyte y una isla al norte de Cebú, y cuidades afectadas en el norte de Cebú. (Nosotros estamos en el centro de Cebú, en la capital, Cebu City. Realmente no nos ha pillado de milagro) Es un desastre. Casi todas las casas tienen destrozados los tejados. Los tendidos eléctricos están destrozados, con lo que no hay electricidad. Imagínate, por ejemplo, para cargar un móvil. Así que la gente no sabe dónde están sus familiares, si están vivos o no, no pueden contactar con ellos. Las granjas, las escuelas, ... están destrozadas. Los árboles centenarios que es de donde sacan las frutas tropicales como el mango, o los cocoteros, casi todos están arrancados de raíz... Cuando fuimos al norte de Cebú el Sábado pasado, vimos muchísimos niños pidiendo junto a la carretera, kilómetros y kilómetros de carretera llenos de niños pidiendo. La gente no puede trabajar, no tienen árboles, no tienen casa, no hay escuelas... Creo que ahora en Diciembre se corta oficialmente la ayuda del gobierno en cuando a comida... Así que esto va a ir empeorando. Ahora estamos en la etapa de la reconstrucción. Es un desastre... Y esto es sólo un poco de lo que hemos visto, a sólo 3 horas de nuestra casa. . 

Hace dos semana estuvimos en una ciudad en el norte de Cebú, Tabogón, repartiendo comida a los afectados por el tifón, con los Agustinos Recoletos de aquí de Cebú. Repartimos la ayuda desde la Parroquia del pueblo. Repartimos comida para 500 personas que ya nos estaban esperando cuando llegamos. Todo estaba muy bien organizado y gracias a eso pudimos repartir bien las bolsas de comida. Cada bolsa era comida para una semana, más o menos, y costaba unos 500 pesos (el sueldo de una mañana entera de una señora trabajando en una casa son 100 pesos). Las bolsas llevaban arroz, latas de carne picada, latas de sardinas, pasta y agua. Algunas personas vinieron caminando unos 5 km para recoger la ayuda. En la Iglesia Católica las ayudas se están repartiendo desde las Parroquias. Cada uno de los que venía tenía un número y había sido registrado en el registro de la Parroquia, donde se lleva control de la gente que necesita algo. Todo muy bien organizado y muy efectivo el reparto de ayuda. 

El obispo de Cebú ha organizado un hermanamiento entre parroquias en Cebú. Así, cada parroquia de la Capital, que es donde estamos nosotras, está hermanada con una parroquia del norte de Cebú, de las afectadas por el tifón. Nuestra Parroquia está hermanada con una parroquia en Malapascua, una isla pequeña en el norte de cebú.

Cuando veo tanto desastre pienso, ¡cuántas cosas tengo! Cuánto me acuerdo en estos días de la frase de Santa Mª Rosa Molas: "A mí todo me sobra y CUÁNTOS HAY SIN AMPARO Y SIN CONSUELO"

Ya sabéis que nosotras somos una Comunidad pequeña, y por eso nosotras solas no podemos hacer mucho. Así que estamos canalizando las ayudas a través de las Parroquias o a través de otras Congregaciones. 

Hoy he ido a recoger el dinero que habéis mandado. He recogido 55661 pesos filipinos. Eso aquí es muchísimo dinero. ¡MUCHÍSIMAS GRACIAS! El dinero lo hemos llevado íntegro a los Religiosos del Verbo Divino, que están presentes hace muchos años en Leyte y en los lugares más afectados por el tifón. Ellos están llevando a cabo un proyecto de reconstrucción de casas. Les hemos pedido que nos manden fotos para que veáis en qué se están convirtiendo vuestros donativos. ¡¡¡GRACIAS DE NUEVO!!! 

También os pido que recéis por nosotras y por esta gente. Sólo Dios les puede dar la fuerza para seguir adelante. 

Contad siempre con mi oración por vosotros. Un abrazo para todos: Inma.